Durante las 24 horas que ha durado la protesta el medio centenar de encerrados han recibido innumerables muestras de apoyo de dentro y fuera del sindicato. Una delegación de la Federación de Industria de CCOO, compuesta por su secretario general y por los secretarios de Acción Sindical, Política Industrial y Energía, les han visitado esta mañana para trasladarles toda su solidaridad. Poco antes de levantarse el encierro también ha querido acompañarles la secretaria general de Industria de Madrid de CCOO.
La dirección de Endesa, que desde el inicio de la negociación del convenio (octubre de 2012) no han acercado posturas, ni cambiado sus aspiraciones en flexibilidad, competitividad y productividad, considera ahora inmovilistas a los representantes de los trabajadores y trabajadoras que han protagonizado el encierro.
La dirección de Endesa, siguiendo los dictados de Roma, niega a los trabajadores de la compañía eléctrica el reconocimiento que merecen a su eficiencia. En Italia se concede a los trabajadores del Grupo ENEL una prórroga convenida del convenio, con incremento salarial que garantiza el poder adquisitivo de sus trabajadores, y sin cambios en estructura profesional o retributiva. Mientras, en España se niega a los trabajadores de Endesa la continuidad de sus condiciones laborales.
Ayer los trabajadores y las trabajadoras de Endesa realizaron un esfuerzo más en la negociación del IV Convenio Marco, presentando una nueva propuesta de estructura profesional que reduce la actual.
Con relación a la estructura retributiva, la dirección de Endesa presentó, en la reunión de la comisión delegada del pasado 13 de marzo, su planteamiento, que no era otro que reducir las tablas salariales en un 38% y suprimir la paga de eficiencia y de la promoción horizontal. Todo ello, sin un compromiso claro de creación de empleo, mantenimiento de las garantías laborales y prórroga de las herramientas de salidas.
Por el contrario, la dirección del Grupo Enel manifestó que los costes laborales serán reducidos en los mercados maduros en 1.500 millones de euros en los próximos cinco años y que cerca de mil trabajadores de Endesa deberían abandonar la compañía, sin dar explicaciones de las herramientas de las que se haría uso.
CCOO, UGT y SIE creen que los trabajadores y las trabajadoras de Endesa no pueden hacer otra cosa que rechazar esta posición empresarial, que persigue aprovecharse de la situación económica para aplicar los máximos recortes a sus plantillas y derivar sus beneficios hacia otro país.
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